miércoles, 20 de agosto de 2008

Marchas y protestas

Juan Salgado Brito
Diario de Morelos

Nuevamente los maestros de Educación Pública salieron a las calles, bloquearon avenidas y se manifestaron en la Plaza de Armas de Cuernavaca, en protesta por la llamada Alianza por la Calidad de la Educación que implica exámenes de oposición y otras medidas que a decir de los docentes atentan contra derechos y conquistas logradas en sus luchas sindicales.
Todas las marchas, bloqueos y plantones, que realizan ciudadanos inconformes y que no encuentran otro camino para hacerse escuchar por el gobierno y las autoridades sino la manifestación pública de protesta desde luego que causa incomodidad, disgusto y hasta enojo de mucha gente que se ve afectada al no poder transitar o desplazarse libremente en pleno ejercicio de sus derechos; por eso bien justificada estaría una demanda pública en paralelo para que el Gobierno y las autoridades no dejaran llegar a esos extremos de la movilización a los grupos que con razón o sin ella se manifiestan de esa manera, claro que esto implica oficio político, capacidad y disposición para el diálogo, voluntad y disposición para resolver, sensibilidad humana y muchos ingredientes más de los que al parecer muchos gobernantes y funcionarios están ajenos, mostrando muchas veces desinterés, indiferencia y soberbia para abordar y resolver conflictos sociales que llevan a la gente a manifestarse precisamente con marchas y bloqueos.
En lugar de resolver, dialogar y conciliar sobre las peticiones de quienes protestan, con la mayor frecuencia, el gobierno y las autoridades recurren al camino fácil de la descalificación, denostando y tratando de desprestigiar por todos los medios posibles a su alcance las expresiones de inconformidad y rechazo que la ciudadanía muestra sobre decisiones, actos de autoridad u omisiones que le afectan.
Los trabajadores de la educación y sus líderes que ayer mostraron una vez más su capacidad de convocatoria y movilización no pueden ser ignorados ni subestimados en sus reclamos, ya paralizaron las escuelas de instrucción pública en el estado, ya tomaron y bloquearon vías públicas en la capital morelense, ya dieron señales de fuerza y oposición a los acuerdos que entre la cúpula directiva del sindicato magisterial y el gobierno han pactado sobre la Alianza Educativa, el examen de oposición y otras medidas.
El Gobierno Federal, el Gobierno del Estado y los Ayuntamientos no pueden ni deben abandonar a la sociedad a su suerte, dejándola a merced de todo tipo de actos de protesta, manifestaciones, marchas, bloqueos y plantones de ciudadanos y grupos inconformes que al exigir sus derechos pueden estar afectando la libertad y también los derechos de terceros. Tampoco deben mostrar cerrazón a las peticiones y demandas de quienes exigen respuesta sino más bien darles curso y solución.
Dar cause a la inconformidad social y a la protesta ciudadana es deber ineludible e inaplazable de las autoridades. En el cumplimiento de este compromiso deberían acreditar capacidad de Gobierno, de Operación Política y de Solidaridad Social entendiendo que al igual que los liderazgos, la autoridad más que imponerse debe merecerse.

1 comentario:

Davo Valdés dijo...

¡Hola¡ acabo de encontrar este blog. Soy voluntario de Greenpeace México aqui en Morelos y les mando un afectuoso saludo. Enhorabuena por el trabajo que estan haciendo, los agregue a la lista de links verdes en el blog de Greenpeace Morelos.

¡Saludos!