domingo, 26 de octubre de 2008

Ecosofía: El triste panorama medioambiental de Morelos

Luis Tamayo Pérez
La Jornada Morelos

Estimado lector, lamento mucho informarle que a pesar de nuestros esfuerzos, el panorama ambiental de Morelos no se presenta nada halagüeño.
Como muchos de ustedes saben la unidad verificadora de la construcción de la primera etapa del relleno sanitario de Loma de Mejía le ha dado su aprobación por lo que ese proyecto tan dañino avanza sin objeciones. No sirvió de nada que los científicos que acompañaron a Oscar Dorado rectificaran su error y ahora se declaren contrarios al proyecto.
La comunidad científica tampoco respondió con la fuerza debida para que su impacto hubiese sido efectivo. Y nuestro gobierno tampoco ha tenido la disposición para reevaluar dicho proyecto. Realmente lo siento por los pobladores de Temixco y demás regiones al Sur de Loma de Mejía cuya salud, en los años venideros, se verá sensiblemente afectada. Aunque no sirva de nada debo decirles que realmente lo intentamos.
También avanza imparable el proyecto de construcción de la autopista Lerma-Tres Marías. Los intereses en juego ahí son enormes y la condena a muerte del Gran Bosque de Agua, la mayor zona de recarga de acuífero de la región, está jurada.
Los enormes esfuerzos de Greenpeace, los Guardianes de los Árboles y de múltiples investigadores de nuestro estado han servido también de muy poco. No quiero imaginarme en qué se convertirá ese ahora hermoso bosque una vez que la nueva carretera impulse el “desarrollo” inmobiliario y la urbanización.
No quiero imaginarme lo que pasará con los pozos de nuestra ciudad una vez que el asfalto y el pavimento hayan transformado nuestra zona de recarga de acuífero en una de correntía de agua… ¡y ello en los años en los que se acelera el calentamiento climático global!
Tal y como ha denunciado reiteradamente el maestro César Añorve, la conciencia ambiental de nuestro país es muy poca. Recientemente nos narró, en una conferencia dictada en el Cidhem, de aquellos años en los que, siendo niño, podía bañarse en los ojos de agua cercanos al Salto de San Antón, antes de que esa tristemente contaminada fuente de agua se convirtiese en la “banda transportadora de desechos” que es ahora.
El maestro Añorve denunció la estupidez que implica ensuciar el agua con nuestros excrementos, los cuales son fuente de nutrientes de nuestro suelo… ¿Por qué contaminar el agua con nuestros excrementos cuando pueden ser tan benéficos para el suelo? Y las descargas de nuestros drenajes ¡van a dar a las barrancas! A esas hermosas creaciones que la naturaleza regaló a nuestro estado.
Estamos convirtiendo una de las regiones más hermosas del planeta, pues ello es Cuernavaca, en un muy triste muladar.
Nuestras voces tienen en nuestras autoridades poco, muy poco, impacto y la sensación es la de hablar en el vacío.
Lamento informarle, estimado lector, que somos muy pocos y muy pequeños, además nuestros recursos no tienen comparación con los de los ecocidas. Nosotros no podemos comprar voluntades ni tenemos interés en hacerlo.
Intentamos comunicar respecto a esto solamente porque nos enteramos un poco antes del panorama que viene y por ello intentamos dar la señal de alarma.
Pero no se puede salvar a quien no lo desea, ¿no es cierto?

1 comentario:

Daniel "Zim" Flores dijo...

Hay que luchar por slavar no solo a nuestro pais si no tambien al mundo entero, no hay que desanimarse si uno conyinua luchando podremos lograr grandes cosas, lean aqui y enterese como ayudar: www.unaesperanzanueva.blogspot.com